Hallan un brazalete de oro en el Cabezo Redondo
- 26 junio, 2012
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En el yacimiento de Cabezo Redondo de Villena han hallado un brazalete de oro de la Edad de Bronce, se cinta de doce milímetros de ancho con dos pasadores como cierre.
El descubrimiento ha tenido lugar en la última campaña de excavaciones llevadas a cabo la semana pasada por arqueólogos y estudiantes de la Universidad de Alicante bajo la dirección del profesor, Mauro Hernández.
La pieza se halló entre dos estratos de cereales carbonizados de uno de los habitáculos del Cabezo Redondo, cerca de un jarrón de cerámica roto, por lo que las primeras hipótesis que se barajan es que la pieza de oro pertenecía a los habitantes de dicha vivienda.
A priori no se baraja ninguna vinculación con piezas de oro encontradas en el término municipal de Villena, como el “tesorillo” del Cabezo Redondo o el “Tesoro” de Villena descubierto en la Rambla del Panadero
No obstante, la Consellería de Cultura enviará a Estados Unidos los dos estratos de cereales para su análisis y datación radiocarbónica con el fin de establecer su cronología y por tanto la del Tesoro de Villena y la del tesorillo.
Además, de esta pieza “clave para poder interpretar las cintas aparecidas en el tesorillo del Cabezo Redondo, en la última campaña también ha aparecido un collar de bronce con pequeños elementos de oro, en muy mal estado de conservación, y un colgante de piedra, que serán restaurados por el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración.
Las primeras analíticas sobre la composición del brazalete, realizadas en la UA, han confirmado que se trata de oro con un alto grado de pureza con una pequeña aportación de plata.
El hallazgo de esta pieza refuerza la importancia del yacimiento de Cabezo Redondo “excepcional y único por su estado de conservación no sólo de la Comunidad Valenciana, sino de España”, según señaló el codirector de las excavaciones, el profesor de arqueología de la Universidad de Alicante, Mauro Hernández.
En el inicio de la actual campaña, Mauro Hernández, adelantó que esta edición Cabezo Redondo iba a volver a sorprender al intuir la importancia de los objetos hallados en los primeros días de trabajo, una cerámica decorada con rellenos de pasta blanca, objetos de metal, de hueso y un molde para la fundición.
Insistió en que esta campaña cerraba una etapa de trabajo dentro del yacimiento del Cabezo Redondo y que si el próximo año no recibía ayudas para llevar a cabo, al menos durante un mes, trabajos de excavación y recuperación no trabajaría en Villena.