Los manteros vuelven a las dianas festeras

  • 15 junio, 2012
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La Junta Central de Fiestas de Villena aprobó la propuesta de la comparsa de Andaluces de permitir la participación de “manteros” en las dianas de las próximas fiestas de moros y cristianos. Antes de la participación de la mujer en los desfiles, hace veinticinco años, los “manteros” eran las personas que participaban en este desfile de la mañana, sin necesidad de llevar el traje oficial de la comparsa e, incluso, sin pertenecer a la misma podía formar parte del mismo.

Este es el cambio más significativo que se incluirá en el programa de actos de las próximas fiestas. El presidente de la Junta Central de Fiestas, Antonio Navajas, indicó que a partir del lunes 18 de junio se va a crear un grupo de trabajo para regular la participación de los “manteros” en este desfile. No obstante, insistió en la necesidad de impulsar las dianas dentro de las fiestas de Moros y Cristianos, unos actos que en los últimos años han decaído en participación y siendo pocos los festeros que participan en las mismas.

Otra de las novedades que aprobó la asamblea de compromisarios es la modificación del itinerario del pasacalles propuesta por el Ayuntamiento de Villena.

De este modo, este acto anunciador de la fiesta, y que se desarrolla el último domingo del mes de agosto, se iniciará en la Plaza de Santiago, discurrirá por la avenida Constitución, plaza María Auxiliadora, calle La Virgen, Cristóbal Amorós, paseo Chapí, calle San Francisco, plaza Las Malvas, Plaza el Rollo y calle Nueva. En este punto, el año pasado la Junta Central de Fiestas optó por eliminar la zona del Rabal y dirigirse a la plaza de Santa María y por la calle Mayor hacia la plaza de Santiago donde concluyó el acto. Cambió que molestó a los vecinos del Rabal por la eliminación del recorrido tradicional por las calles del casco histórico.

Este año, y a petición del Ayuntamiento, la Junta Central ha aprobado que desde la calle Nueva, el pasacalles discurra hasta la plaza de Biar, y desde allí continuar por las calles Onil, Castalla y La Rambla hasta llegar a la plaza de Santa María. El objetivo es mantener el desfile por las calles del casco histórico tal y como pedían los vecinos del Rabal, al mismo tiempo que aunar la demanda de los festeros del mantener los disparos de arcabucería durante todo el recorrido del pasacalles, al garantizarse en todo el recorrido la seguridad de los mismos.

La Junta Central de Fiestas también admitió la propuesta de la comparsa de Piratas de valorar la actuación de  las bandas oficiales de cada comparsa tanto en el desfile del Pasodoble del día cinco de septiembre por la mañana, como se hacía hasta ahora, como en la Ofrenda, el día siete de septiembre.

Finalmente se desestimaron las tres propuestas presentadas por la comparsa de Moros Viejos. No prosperó la iniciativa de desdoblar en dos jornadas el desfile de La Cabalgata, tampoco la de adelantar el acto del pregón una hora- se mantiene a las doce de la mañana del día cinco de septiembre y los compromisarios votaron en contra de crear un nuevo desfile el día cinco de septiembre al finalizar la Entrada. Los Moros Viejos propusieron que tras este las comparsas iniciaran un nuevo desfile desde la iglesia de los Salesianos hasta la iglesia de Santiago.

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