Cientos de personas participan en las I Jornadas BIC

Cientos de personas han participado en las numerosas actividades organizadas alrededor de las I Jornadas BIC (Bien de Interés Cultural) que se desarrollaron el pasado fin de semana en Villena, organizadas por el Ayuntamiento de Villena y que ha contado con la colaboración de tres asociaciones de vecinos- Rabal, San Antón y Cruces y la asociación pro restauración de la ermita de San José.

Tanto la edil de Turismo, Mercedes Menor como el responsable de la Oficina del Casco Histórico, César Haba, ha valorado muy positivamente estas jornadas, “ya que han permitido que los ciudadanos disfruten de su casco histórico desde su conocimiento, y valorarlo más si cabe”, afirmó Menor.

Las actividades que congregaron a más público- varios cientos- fueron las visitas al campanario de Santa María, a la bodega medieval de El Caracol, una de las pocas que se conservan en un casco urbano, los minados de la Plaza Mayor, la marcha nocturna a la Sierra de la Villa y Mina de los Colores, organizada por el Centro Excursionista que sumó cien participantes y la encalada del domingo.

En esta segunda ocasión, unas ochenta personas se dieron cita para encalar unas quince viviendas- abandonadas o de propiedad municipal- y muros de las calles Buena Vista y La Leña, así como las cuevas situadas en el vial de la Losilla. Todo ello con el fin de dar una sensación de limpieza en la zona y favorecer su tránsito

El responsable del  Casco Histórico, César Haba señaló que debido al éxito se plantean realizar una segunda edición el próximo año.

En el acto de inauguración que tuvo lugar el pasado jueves 24 de mayo, el alcalde aludió a la condición de Villena como “ciudad abierta”, y apuntó que estas jornadas “confirman lo que sentimos y queremos para nuestra población”. Esquembre se refirió al compromiso que supone la consideración BIC para recuperar y poner en valor el barrio antiguo, apelando a la necesidad de contar con la participación activa de las asociaciones vecinales.

 En la ponencia inaugural, Laura Hernández, directora del Museo José María Soler, apuntó que el conjunto urbano del casco histórico fue declarado Bien de Interés Cultural en 1968, si bien explicó que existen otros BIC individuales como el Castillo de la Atalaya, la Iglesia de Santiago, el Palacio Municipal, el Castillo de Salvatierra, el Santuario de las Virtudes, el yacimiento del Cabezo Redondo y el Tesoro de Villena. Hernández concluyó que “el patrimonio es fuente de riqueza y su conservación nos corresponde a todos, porque constituye la seña de identidad de un origen común”. 

Después, Santiago Hernández, de Villena Cuéntame, acompañado por Joaquín Sánchez y Ernesto Pardo, hicieron memoria por medio de fotografías entrañables de las calles y plazas del barrio antiguo y estrenaron una película de las Fiestas de Moros y Cristianos del año 1927.