Villena aprueba una ordenanza que regula el uso de locales de ocio

Villena aprobó en el Pleno de marzo la ordenanza  que regula el uso de los locales de ocio en el término municipal, con el apoyo de todos los grupos que conforman la corporación municipal, Verdes, PSOE, VCD y PP.

No obstante, la regulación de los locales de fiestas, no se incluye todavía en esta ordenanza y  se aplaza hasta que la administración valenciana apruebe una ley sobre el uso de los mismos, tal y como se indicó en el Pleno.

Tras más de un año de trabajo y con la aportación de diversos colectivos sociales y grupos políticos, se aprobó la regulación de estos locales, que en los últimos años han proliferado en la ciudad, sobre todo entre los jóvenes que no disponen de  alternativas de ocio en la población, y que en palabras del concejal de Seguridad Ciudadana, Carlos Beltrán, “su objetivo no es limitar los derechos de los ciudadanos a la libertad de reunión, sino ser un instrumento para dotar de mayor seguridad a los usuarios y propietarios de dichos locales, así como mejorar la convivencia con los vecinos”.

Indicó que el año pasado se vivieron al menos dos sucesos graves por el uso de estos lugares de reunión con dos conatos de incendio donde no se tuvo que lamentar daños personales, “pero donde no se tenía claro de quién hubiese sido la responsabilidad  si hubiese pasado una desgracia”.

En  la ordenanza se contempla una serie de sanciones económicas dependiendo del tipo de infracciones cometidas, que podría oscilar entre 700 hasta 3.000 euros las graves, entre las que se encuentran molestias por ruido, perturbación de la salubridad y la convivencia.

Se establece la creación de un registro municipal de locales de ocio, donde obligatoriamente  deberán inscribirse todos los inmuebles arrendados para uso lúdico, con la aportación del  contrato suscrito por usuarios y propietarios. A propuesta  del Partido Popular, también se ha incluido un protocolo de resolución de conflictos “donde se pretende que el Ayuntamiento actúe como interlocutor”, afirmó el edil de Seguridad Ciudadana, Carlos Beltrán.

El Partido Popular recordó que los locales de ocio tienen consideración de domicilios particulares, por lo tanto de espacios inviolables donde no se puede entrar  sin el consentimiento del titular, demandando que en el caso en que se incurran en reiteradas infracciones graves por parte de los usuarios, “se cancele la inscripción de éste en el registro municipal de locales de ocio, pero no se lleve a cabo el cierre del mismo como contempla la ordenanza”. Esta recomendación fue aceptada por el equipo de gobierno y recogida en la nueva norma, que entrará en vigor después de la celebración de la Pascua, época tradicional de reuniones de jóvenes en este tipo de inmuebles.

Todos los grupos políticos señalaron que esta regulación debe ser flexible y ajustarse a las demandas y necesidades de usuarios de locales de ocio, propietarios y vecinos, por lo que debe estar abierta a modificaciones futuras.

En este pleno se aprobó, también, por unanimidad el solicitar a la Generalitat el  pago de la deuda que tiene pendiente de las obras de la plaza de toros, de los ejercicios 2012 y 2013 y que asciende a más de dos millones de euros, también se aprobó sacar la adjudicación del servicio de monitores para las escuelas deportivas municipales.

El Partido Popular se opuso a la aprobación de la liquidación de la cesión del servicio de agua y alcantarillado que asciende a más de dos millones de euros que debe aportar la anterior adjudicataria al Ayuntamiento, “porque el informe no está firmado por un técnico municipal sino por un abogado que no tiene contrato con el consistorio”, afirmó el concejal popular, José Joaquín Valiente.

El tripartito rechaza reducir los cargos de confianza

La solicitud del PP de reducir los cargos de confianza del equipo de gobierno, se vivió con expectación dentro del salón de Plenos. La edil de Participación Ciudadana, Mercedes Menor, no asistió a la sesión plenaria y el concejal de VCD, Juan Richart, en varias ocasiones había manifestado su apoyo a la reducción de estos cargos. Si Richart se abstenía, al estar el tripartito en minoría, la moción se votaría a favor.

Finalmente, Juan Richart, se sumó a las argumentaciones del equipo de gobierno de aplazar la reducción de cargos hasta la aprobación de los nuevos presupuestos municipales. Además solicitó a los populares “que diesen ejemplo” y redujesen las jornadas laborales  de los dos concejales liberados que tiene el partido en el Ayuntamiento, provocando el asombro de los populares.

El alcalde reconoció que este tema necesita una regulación, insistiendo en que en esta legislatura se han reducido los mismos con respecto a la anterior.