Cortar y cambiar

Desde la fundación de nuestro partido, estamos reclamando lo que hemos dado en llamar  regeneración democrática. Por si alguien no lo había entendido, o simplemente pensaba que se trataba de palabras vacías, ahora tiene la oportunidad de ver como desde el movimiento  15-M, jóvenes de nuestro país que no están solos, denuncian la putrefacción de un sistema que maquillado de democracia avanza ganando velocidad hacia un autoritarismo indigerible.

 La clase dominante tanto política como económica controla mediante una ley electoral que manda a la papelera las ilusiones de millones de ciudadanos, para que no entre en su circulo de los favorecidos alguien que  no pertenezca a alguna de las principales familias.

 Todo ello para perpetuar los privilegios de los de su clase, y para lo que cuentan con el inestimable apoyo de sicarios abiertamente comprados o sobornados con dinero

público.

 Mi obligación en estos momentos, en plena campaña  seria decir que tenemos

que votar para cambiar las cosas, y efectivamente seré consecuente con ello y así lo

haré, pero no niego la simpatía que me provoca esta actitud merecidamente desconfiada de un sector cada vez mayor de nuestra sociedad.

 Observar las cacicadas cada vez más descaradas en campaña a la hora de ceder espacios a los partidos que intentan participar en la vida pública, ser testigo de los vetos

informativos, gozar del gobierno para auto proclamar como éxito propio lo que fue un

logro social, y hacerlo todo con respaldo propagandístico y sin ningún rubor, además de

convertir a las personas que lo practican en despreciables, demuestra hasta que punto

se sienten inmunes y por encima de la ley, y a que baja altura quedan sus cómplices.

 Eso nos deja la posibilidad de seguir insistiendo, como estoy haciendo ahora o

unirme a los que acampan en la Puerta del Sol.

 Sinceramente no se que hago aquí pues el sistema cada día huele peor, les pediría a los jóvenes que nos votaran a nosotros, pero no tienen razones para pensar que podamos actuar de manera diferente a los actuales.

 Yo por mi parte si que creo en ellos, así que espero que de una manera u otra, ellos o nosotros consigamos frenar esta alocada y desmesurada ambición de los

mandatarios actuales.  

Ángel Giner Martínez

Responsable de política local del Alto y Medio Vinalopó

Componente en las listas a las Cortes Valencianas – Mayo 2011