Se nos ha ido un periodista, Paco Serradell

  • 3 julio, 2019
  • Comentarios
Se nos ha ido un periodista, Paco Serradell

Director de Canfali Marina Alta y socio fundador de Premsa Comarcal Valenciana

Ramón Climent Vaello (Expresidente y socio de honor de la Associació de Premsa Comarcal Valenciana)

Paco Serradell, el director decano de la Associació de la Premsa Comarcal Valenciana, se nos ha ido sin decir adiós. La muerte, una vez más, ha sido traicionera, inesperada, y nos ha dejado con la ausencia de un periodista que tenía en su cabeza la historia más contemporánea de La Marina, testigo privilegiado de lo que allí ocurría y de lo que no sucedía en los últimos 40 años.

Cuando mantuvimos el primer contacto, en el verano de 2015, para crear una asociación, la primera, de periódicos comarcales valencianos, todos mirábamos a Paco Serradell como una especie de faro con su publicación semanal de 80 ó 96 páginas, que dejaba sin aliento a publicaciones mensuales o bimensuales de 16 páginas. La presencia de Canfali Marina Alta en la Associació era decisiva para su lanzamiento y credibilidad. Y Paco no lo dudó ni un instante y aquí estuvo remando como el que más, con su rebeldía impulsiva, su incontinencia para la crítica y ese punto de buen humor que no siempre se acababa de entender. Paco Serradell, con su generosidad y complicidad, ha hecho que la Associació de Premsa Comarcaal Valenciana sea lo que hoy es.

Recuerdo conversaciones en la que los dos, sesentones, echábamos de menos aquellos años de redacciones llenas de humo, de botella de güisqui en el segundo cajón, del sonido del tecleteo en las olivettis, de largas sobremesas para conseguir una noticia y como ahora íbamos disfrazados de gestores desbordados por la cuenta de explotación y los balances. Y sin embargo, con Paco era muy fácil seguir apasionándote por una buena historia, una denuncia incontestable o una crítica en el centro de la diana. Porque Paco nunca dejó de ser un buen periodista. Y así lo recordaremos, con su aire de canalla divertido a quien al final siempre le vencía el corazón. Y eso sí, siempre en desacuerdo.

Un sincero abrazo, para su esposa Marisa y sus hijas Laura y Sara, desde el respeto y la admiración, de todos y cada uno de los miembros de la Associació que ayudó a crear.

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *