Es dia cinco y es por la mañana

  • 5 septiembre, 2020
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Es dia cinco y es por la mañana

Esther Puche Ribera

“Estamos a 5 y es por la mañana. Déjame que viva el momento con ansia; déjame que vibre al sentir la cercana alegría que ronda mi alma. Respeta el silencio, no me digas nada;si acaso, si puedes haz que se detenga del mundo la marcha, porque dure siempre, porque no se vaya este leve instante de unidad perfecta en tiempo, colores, sonidos, aromas, matices, efluvios que en este momento las cosas exhalan. Si no, si te es imposible hacer el milagro, déjame a mi sólo sentir las palabras que llenan mi mente: estamos a cinco y es por la mañana”. Alfredo Rojas. “La Junta Central de Fiestas de Moros y Cristianos de Villena”. Revista Villena, 1954.

Abro los ojos sintiendo en mi cuerpo la calidez de unas sábanas ya necesarias en las madrugadas de las noches septembrinas. Unos tímidos rayos de sol se cuelan por las pequeñas rendijas de la ventana. El silencio inunda una casa donde unas respiraciones acompasadas me indican que los otros tres moradores de esta casa, aún descansan.
Poco a poco, mis pupilas se acomodan a esa entreluz de la habitación. Una sensación extraña me invade. Intento discernir que es lo que me mantiene inquieta desde hace unos días, incluso semanas, me despierta por las noches y me impide un sueño reparador. Me desperezo, estiro mis músculos y pongo a tono mis articulaciones. Despacio, pongo mis pies en el frío suelo.
En silencio, me desplazo por la penumbra de la casa. Todos duermen. Disfruto de este silencio y la tranquilidad antes de la vorágine de un nuevo día. Un día diferente pero a la vez uno más del calendario.
Es día 5 y es por la mañana. Una mañana extraña, diferente. Una mañana en la que no se oyen gritos, saludas, alegría de todos aquellos que de buena mañana se dirigen a sus comparsas a almorzar.
Un día 5 en el que cambiamos el almuerzo villenero por un café y una tostada. Un día 5 en el que las sedes no están llenas a rebosar de festeros henchidos de alegría preparando los días grandes. Un día 5 en el que no saldremos de la comparsa desfilando con nuestros cargos orgullosos luciendo sus mejores galas en busca de sus madrinas. Un día 5 en el que esas niñas y mujeres no estarán esperando en sus balcones nerviosas, felices, emocionadas, la llegada de sus capitanes y alféreces y todos aquellos festeros que les acompañan.


Un día 5 en el que no acudiremos a la Plaza de Santiago a escuchar el ansiado Pregón de fiestas. Un día 5 en el que no aguantaremos estoicamente el calor que a las 12 del mediodía llena nuestra Plaza y escucharemos atentos a veces y otras no tanto, las palabras que nuestro pregonero nos dedique. Un día 5 en el que no estarán los abrazos con los compañeros de fila a los que solamente vemos de año en año pero de los que nunca nos olvidamos y nos hacen falta en estos días tan especiales. Un día 5 en el que todo nos será extraño………

Desayuno mi café con leche sentada en la mesa de la cocina. Enciendo la televisión y el presentador del noticiero matinal me recuerda que es día 5 y es por la mañana. Me devuelve a la cruda realidad de contagios, PCRs, normas, mascarillas, distancia social………todo lo que en los últimos 6 meses ha llenado tantas y tantas hojas de periódicos, telediarios y conversaciones……………… Me vienen a la cabeza los meses vividos en el trabajo, estrés, soledad, signos y síntomas de enfermedad, aislamiento, miedo………Momentos duros compartidos con las compañeras de trabajo y con los pacientes tratados. Momentos de estrés al ver el rápido empeoramiento de algunos pacientes y momentos de alegría y orgullo al ver la recuperación de tantos otros. Intento dejar esos recuerdos apartados en un lugar escondido de mi mente, como todos los años, disfruto de mis vacaciones este mes de septiembre. Mes de nuestras queridas fiestas, fiestas que este año no se celebran por este maldito virus que irrumpió en nuestras vidas allá por Marzo, justo después de nuestro Ecuador Festero. Apago el televisor. No necesito esta información. Prefiero perseguir los recuerdos del año anterior.
Por las ventanas abiertas de casa no se cuelan risas, pasos acelerados, sones lejanos de bandas de música, no pasan festeros y festeras con las camisetas de peñas y comparsas ni con gorros de campaña ni los fez moros, no pasan aquellos que llevan prendas de sus trajes a otras casa para vestirse en la tarde. No se cuela por las ventanas el típico olor a alábega que en estas fechas siempre inundan las ventanas, balcones, fachadas……. No resuenan las voces de esos jóvenes que apurando tanto la noche, llegan de día a casa tras la noche del día 4, pero es día 5 y es por la mañana.
Salgo al salón y apoyada en el quicio de la puerta, lo observo, el mismo desorden de siempre, los últimos juguetes de anoche todavía sin recoger, algunos papeles por encima de la mesa………………No encuentro el perchero donde todos los años meticulosamente están preparados los trajes de toda la familia. Desde el grande de papá hasta el pequeño del benjamín de la casa, pasando por el femenino de mamá y el de ese pequeño hombrecillo en que se está convirtiendo el hijo mayor. Diferentes tamaños de un mismo traje….. Los gorros y las armas no ocupan la mesa del comedor, un extraño orden que esa misma noche de día 5 sería convertido en desorden y llenado del colorido confeti de la carroza……………………
Es día 5 y es por la mañana, pero no es un día 5 cualquiera, es el 5 de Septiembre de 2020, el año en el que un virus lo paralizó todo, el año en que el Covid-19 sesgó la vida de muchas personas en todo el mundo y suspendió multitud de actividades, trabajos, colegios, celebraciones y también las tan ansiadas fiestas de Villena, así como las de muchos otros municipios.
Pero a pesar de que nada es igual a otros años, el silencio de esta mañana, el aire que se respira……nos lleva a multitud de días 5 vividos, a multitud de mañanas y madrugadas esperando el tan ansiado día 5, nuestro día grande……..
Me resisto a subir la persiana del salón………cierro nuevamente mis ojos…………..déjame sentir esa sensación tan cercana y tan lejana a la vez, respeta el silencio que me envuelve llevándome a recuerdos tan agradables; si puedes, transpórtame a esos instantes de felicidad que otrora nos acompañaron, pero si esto no es posible, déjame sentir las palabras que llenan mi mente……..ES DÍA 5 Y ES POR LA MAÑANA.

1 Comments

  • Es muy emotivo es la pura realidad eres muy grande Esther, y muy buena narradora muchos besos y abrazos de parte de una amiga

    Araceli

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