Junio, el mes de los más chiquitines en nuestras Bibliotecas

Y otra vez la Biblioteca “La paz” volvió a plagarse de ojos abiertos, gateos para explorear el lugar, en ocasiones totalmente desconocido, sonrisas, algún llanto y sobre todo mucha expectación por parte de los bebés y de las madres, padres, abuelos y abuelas que nos han acompañado en estos dos nuevos talleres de bebeteca que se llevaron a cabo durante todo el mes de junio en las bibliotecas.

Y otra vez se comprobó que los bebés están ávidos por recibir palabras contadas y narradas, pero también cantadas, susurradas y señaladas. A veces, a través de los propios libros que saborean en el más estricto sentido literal del verbo, porque los muerden y degustan como su primera forma de acercarse al objeto; pero otra veces, simplemente, a través del sonido de la música y de las palabras.

Cinco sesiones en las que, ante todo, las bibliotecarias intentamos mostrar lo que los adultos pueden encontrar en el mercado para nuestros bebés en todo lo relacionado con la literatura y los cuentos, pincelando criterios de selección con el fin de que sepan de verdad qué es lo mejor para iniciarles en este camino fascinante que es la lectura.

Y también, cinco encuentros en los que dar estrategias a los padres y madres para ayudarles un poquito en conocer qué se puede hacer para que al bebé le interesen las historias, los cuentos, la narración… qué hacer para que de verdad les interese este mundo, y para crear, realmente, un ambiente lector en la familia. Porque enseñar a leer se enseña en la escuela, pero enseñar a amar la lectura solo se consigue en la familia. Y ese es nuestro principal objetivo.

Y de esta manera, 22 niños/as volvieron a graduarse en nuestras bebetecas, y con ellos cumplimos ya 13 años de celebración de estos talleres que tan productivos nos parecen, porque es una manera de incluir las bibliotecas como un espacio más en el mundo de los niños y niñas desde que nacen, pero además, en muchas ocasiones, suponen la vuelta de los padres y madres que participan a la biblioteca, lugar del que se habían alejado, en general, desde que habían dejado de ser estudiantes.

Y las bibliotecarias disfrutamos trabajando con estos grupos que solo dan alegrías y satisfacciones, porque siempre, un bebé, da mucho más de lo que recibe, y cada sonrisa supone una nueva puerta que se abre en la biblioteca para acoger nuevos lectores y lectoras.

Ojalá sigamos cumpliendo talleres con muchos más bebés. Y si estáis interesados/as en participar en ellos, no tenéis más que acercaros a cualquiera de nuestras bibliotecas para informaros sobre esta actividad que es gratuita y abierta a bebés de entre 8 meses y 3 años acompañados de un adulto. Como siempre, también en verano, ¡os esperamos con los libros abiertos!

Bibliotecas Públicas Municipales Villena